Gran indignación causó el video que se difundió sobre NXIVM, en donde se muestra cómo a una mujer la marcan en la pelvis con las iniciales KR, presuntamente de Keith Raniere, el fundador de la organización.

El programa era cuidado por un estricto programa de confidencialidad que todo el que entraba estaba obligado a firmar. El curso tenía un costo de 2 mil dólares, según lo informado por Televisa.
Además, se buscaba que sus adeptos involucraran a más personas en un sistema piramidal y así crecer exponencialmente. El proyecto creció y llegó a otros países por medio de licencias, como la de México a nombre de Emiliano Salinas, hijo del expresidente Carlos Salinas de Gortari, y Alejandro Betancour.
En la secta sexual se han visto involucrados artistas, empresarios e hijos de expresidentes en México.
Mujeres, según se informó, se convirtieron en esclavas sexuales de Raniere y fueron marcadas en la pelvis con las iniciales KR, en un hecho de sumisión ante él y otra mujer llamada maestra.
“Es ser marcada como un padrote marcaría a una prostituta o como un ganadero marcaría a su ganado”, expresó Catherine Oxenber.
El grupo se llamaba DOS (Dominant Over Submissive, Dominante Sobre Sumisa, en español).
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