Se fueron a la barranca por jugar carreritas

2012-08-12 | Puebla, Pue.- Dos hombres salvaron la vida milagrosamente a pesar de haber, literalmente, volado y después caído al fondo de la barranca Los Ángeles de una altura de 30 metros, con el automóvil Mustang en el que viajaban tras una noche de farra, la madrugada de ayer, quienes tras el percance abandonaron la unidad, según lo informaron los vecinos del lugar.

Afirman que alcanzaron a ver a uno de ellos por que incluso les pidió ayuda y después se retiró en un taxi.

El automóvil deportivo, Ford, color guinda, con placas XUA-73-57 del estado de Tlaxcala, quedó completamente destrozado, reducido a chatarra y considerado como pérdida total; en el sitio perteneciente a la colonia Barranca Honda, a la altura del kilómetro 9.5 a un costado de la carretera federal a Tlaxcala.

Fue alrededor de las 05:30 horas de ayer, cuando, de acuerdo a lo que refieren testigos, escucharon que varios vehículos circulaban a toda velocidad en sentido a la ciudad de Puebla como si vinieran echando carreritas. Pero uno de esos automóviles, precisamente el Mustang, al llegar al kilometro 9.5, su conductor perdió el control del volante al salir de una curva y pasó entre un árbol y un pequeño muro de cemento para finalmente descender en caída libre por cerca de 30 metros y terminar a menos de metro y medio de las aguas del río.

Mediante un reporte al 066 fueron enviadas al lugar dos ambulancias del 066, la unidad 040 y la 042, así como el vehículo conocido como Goliat, de rescate urbano, más al bajar el personal y hacer la revisión, no encontraron a nadie ni dentro ni fuera del vehículo.

Y es que pensando que él o los tripulantes hubieran salido proyectados se hizo una búsqueda a sus alrededores, sin éxito.

Vecinos del otro lado del puente vieron salir de entre las hierbas a un joven de unos 33 años de edad, vestido de traje gris, todo mojado, lleno de lodo y con la cara ensangrentada; totalmente desorientado y con un fuerte olor a alcohol.

Revelaron que les pidió ayuda para tomar un taxi ya que su acompañante lo había abandonado. Dicen que les mencionó, viajaba de copiloto, que salieron de Apizaco hacia Puebla y se quedó dormido pero al sentir un fuerte golpe despertó y salió de la unidad siguiendo a su compañero, más esté se alejó rápido.

Abundaron que, lo auxiliaron con un balde con agua con la que se lavó la cara, así mismo le fue proporcionado un suéter, se atravesó la calle y abordó un auto de alquiler para alejarse del lugar.

Finalmente, al lugar acudieron a tomar conocimiento de los hechos, elementos de la Policía Federal de la patrulla número 13438, asegurando el vehículo en el corralón oficial, mientras continúan las investigaciones de este increíble caso.